Blancanieves y el Cazador, una película para animar a leer




Por Edgar Jhonny López Arias.

Hay adaptaciones cinematográficas de tan alta calidad que se hace obligatorio  releer la obra original. Así,  esas escenas que en el texto dispararon  la imaginación con  la película  quedarán enriquecidas junto con un pedazo de nuestro vivir.

Si dicha producción del séptimo arte tiene que ver con un cuento infantil, con mayor veras hay que hacer el ejercicio de volver a leer.  Pero, también hay necesidad de crear casi que un ritual.

Se trata nada menos que de recordar la manera como transformamos esas palabras escritas en pensamientos que volaron y  cobraron vida y tuvieron más movimientos, colores, gestos, y pudieron hablar, reír, llorar y gritar.

Por eso, para asistir a la excelente película Blancanieves y el Cazador, es recomendable volver a leer la versión original de los hermanos Grimm, narrarla y/o conversar con los miembros de la familia, especialmente los niños, y si no hay, entonces los del vecindario y rememorar qué fantasías accesorias le poníamos al cuento. Sería bueno también, volver a ver la película de dibujos animados de  Walt Disney.

Con este arsenal de recuerdos y llevando a los niños, asistir a la función. Deleitarse con la superproducción, gozar de los impresionantes efectos, la música y de la  trama, para salir renovado en pensamientos, confrontando versiones, pero también inquietos y deseosos de conocer más sobre  esta historia de la chica, la reina mala, los siete personajes de corta estatura y los pretendientes.

Para ello, y en compañía siempre de los menores, indagar en Internet sobre Blancanieves, conocer que sí hubo una historia verdadera, que se han producido cerca de diez películas, que la televisión española hizo su versión, los TresChiflados filmaron su primera producción cinematográfica en colores con un guión de este cuento y que también hace unos pocos días, fue estrenada otra versión de Blanca Nieves  tipo comedia y en la que actúa Julia Roberts.

Obviamente que hay que ir a ver esta otra adaptación para la pantalla gigante, así como buscar diversas versiones escritas y estudios sobre este cuento de origen alemán. Igualmente, leer a los que saben de cine para que nos sigan enriqueciendo con sus criticas. Imagínense un debate entre adultos, adolescentes y niños, sobre este tema en donde cada uno tiene  un importante punto de vista, porque vivió la historia y además un bagaje en donde las palabras impresas han jugado un papel determinante.

Y que tal convertir esta vivencia en una dinámica que se desarrolle en una clase en donde los estudiantes, sin importar si son de colegio o de universidad, hablen de sus sueños de niños, sus ideas de adolescentes y sus renovados conceptos, luego de saber más de Blancanieves.

Nunca existirá un tema banal, si hay preocupación por documentarse. 

¡Ahhh, las posibilidades de gozo que ofrece la lectura! 

Blancanieves y el Cazador: Ver aquí







 

Comentarios